martes, 24 de marzo de 2015

Epson impulsa las aulas tecnológicas interactivas

Conectividad, innovación pedagógica y mayor interacción se integran en las salas de distintos colegios gracias a la tecnología Epson.

Epson incorpora innovadoras tecnologías de videoproyección a las aulas escolares, haciendo de las clases un espacio dinámico, entretenido y tecnológico. La incorporación de los videoproyectores interactivos BrightLink serie 500 en las aulas de algunos establecimientos, han logrado un cambio en la forma de enseñar y entregar los contenidos.

Ver a los alumnos con sus dispositivos móviles en las salas de clases se ha convertido en un escenario cada día más frecuente. Pero lo que solía ser motivo de distracción para los profesores, hoy, por el contrario, es una herramienta clave para facilitar el aprendizaje y mejorar la enseñanza, a través de una participación más activa de sus estudiantes, y permitiendo que el aprendizaje resulte más efectivo y oportuno.

La nueva serie BrightLink ofrece a los profesores un mayor control en las aulas de los múltiples dispositivos móviles que los alumnos llevan al colegio, ya que logran funcionalidad incorporada al moderador, permitiendo la conectividad de hasta 50 ordenadores, tablets y otros dispositivos portátiles a través de la red. Los profesores pueden controlar de forma inalámbrica lo que se ve en los dispositivos personales, mostrando un máximo de cuatro pantallas al mismo tiempo. Esto ha sido una gran revolución en la enseñanza, ya que da la oportunidad a cada alumno de aportar contenidos e ideas, logrando un trabajo en equipo, y aumentando además su participación en clase.

Según Christian Dettleff, Business Manager Cono Sur Epson, “el valor agregado que nuestra compañía está entregando a la educación es muy importante; todos los años nos visitan expertos de Japón para evaluar el uso y mejoras de los proyectores en las aulas. Es así como la tercera generación de los videoproyectores interactivos BrightLink está logrando que muchos dispositivos se conecten entre sí y al proyector, lo que genera una red de colaboración dentro de la sala, logrando integrar alumnos, profesores, tecnologías y contenidos; así como otras herramientas de software y dispositivos en el proyector que permiten mejorar la dinámica de clases y el aprendizaje”.

Al integrar los dispositivos tecnológicos en una sala, con los proyectores interactivos Epson, se facilita la conectividad, ya que dispositivos como Tablets, Smartphone, IPhone, IPad y notebooks, entre otros, están siendo aprovechados por los alumnos y el profesor, para compartir conocimientos y abordar contenidos generales de sus clases.

Estos equipos interactivos entregan un proceso de aprendizaje más dinámico, tratándose de un recurso que convierte a las clases en algo más atractivo visualmente y permitiendo una multiplicidad de metodologías que se adaptan a los diversos estilos cognitivos del alumnado. Por otra parte, se ha fomentado una mayor participación en clases, especialmente en las actividades más prácticas brindando la oportunidad de acceder a materiales muy variados provenientes de diversas fuentes, siendo aplicable a todas las etapas educativas de forma flexible y adaptable a los estudiantes y docentes.

“Esta incorporación ha favorecido la lectura, el desarrollo de las matemáticas, el dibujo de figuras geométricas, hasta visualizar el cuerpo humano en 3D. Un docente que utilice tecnologías, es aún más valorado por los alumnos porque pueden hablar el mismo lenguaje”, comenta Sebastián Godoy, Jefe de Tecnología del colegio Saint George’s College, institución chilena que ya forma parte de esta tendencia.

Esta moderna tecnología ya se está aplicando en México, Perú, Brasil y Colombia, siendo Estados Unidos el pionero y un ejemplo de su utilización en la mayoría de sus colegios. En todos estos países han sido los docentes los encargados de poner en marcha toda la tecnología de los modernos equipos, debiendo aprender y actualizar su forma de enseñar.

De esta manera, Epson permite a los estudiantes explorar y conectarse en una sociedad que demanda nuevos modos de aprendizaje, enseñanza e inclusión.